¿Cómo se contagia?
El virus es transmitido al contacto piel con piel, cuando la zona infectada entra en contacto con membranas mucosas principalmente oral y genital. A través de las secreciones de la mucosa el virus penetra en el organismo. El resto de la piel es demasiado gruesa, lo que impide su entrada.
Un factor importante a tener en cuenta es que el virus es muy contagioso y puede ser transmitido, aunque no esté en una fase activa, de manera que una persona sin lesiones visibles continúa eliminado el virus de forma intermitente, pudiendo contagiar a su pareja sexual.
¿Cuáles son los síntomas?
Aunque no siempre se tienen síntomas, una persona puede ser portadora del virus y no saberlo, algunos estudios nos dicen que hasta un 80% no desarrolla síntomas.
El herpes se caracteriza por episodios repetidos que se desarrollan con una erupción de pequeñas ampollas, generalmente dolorosas, con sensación de quemazón tanto en la boca y cara como en los genitales. Antes de la aparición de las ampollas ya se experimenta un aumento de la sensibilidad con quemazón y dolor en la zona donde luego aparecerán las lesiones.