No me viene la regla. Lunes 7 de mayo. – Hace días que debería haberme venido la regla, pero sigue sin bajarme.

Mi decisión fue abortar Belladona Mi decisión fue abortar

Hace un par de meses empecé a tontear con un chico de clase; Pablo.

El día de mi 17 cumpleaños fuimos de fiesta un grupo de amigas y amigos, después de pasar la tarde bailando y divirtiéndonos empezamos a besarnos y nos enrollamos, para los dos fue nuestra primera vez, utilizamos preservativo, pero con los nervios y la inexperiencia lo pusimos mal y se nos rompió.

Ahora estoy asustada y no me atrevo a hacer un test de embarazo; me da miedo que me salga positivo.

Test de embarazo. Martes 8 de mayo.
– Hoy al salir del instituto por fin me decidí a pasar por la farmacia y comprar el test de embarazo, estuve a punto de decírselo a mi amiga Laura, pero prefiero esperar al resultado, tengo la lejana esperanza de que me salga negativo y así me ahorro dar explicaciones.

Después de comer y aprovechando un rato que me quedé sola en casa fui al baño, espero unos minutos interminables y… positivo.

Se confirmaron mis temores, empiezo a llorar, confusa y asustada. Ahora tengo que afrontar lo que tanto miedo me daba; contarlo en casa, aunque mis padres son bastante enrollados seguro que esto no les hace ninguna gracia. Algunas veces hablamos del tema de las relaciones sexuales, pero muy por encima y es que creo que ellos piensan en el fondo que eso les pasa a las hijas de otros; pero no a mí.

Mi decisión es clara, debo abortar. No puedo ni quiero tener un hijo con 17 años.

A Pablo de momento no voy a decirle nada, nos gustamos, pero nada más, y no quiero que se sienta obligado a nada o que quiera influir en mi decisión.
A quien si se lo voy a decir es a Laura, es mi mejor amiga. Le envío un whasapp para quedar con ella y contárselo, me ayudará a buscar una solución antes de decírselo a mis padres. Quiero informarme un poco sobre donde se puede abortar y cuánto cuesta para no preocuparlos más de lo necesario por el tema del dinero. No tengo ni idea de cuánto puede costar un aborto y en mi casa la economía no está para tirar cohetes.

Cuando se lo digo a mi amiga se queda flipando,
– No tenía ni idea de que Pablo y tú os habíais enrollado, me dice. Me abraza, me da ánimos y lloramos juntas, pero hay que reaccionar.
Juntas empezamos la búsqueda en internet. Al poner en el buscador “abortar en Asturias” sale una información que me quita un peso de encima “El aborto, desde el año 2010 es un derecho reconocido como una prestación de la Seguridad Social”. Eso quiere decir que es gratuito, me alegro de mis padres no tengan que hacer un sacrificio económico.

– Mañana no tenemos clase a primera hora, me recuerda Laura. Así que iremos al centro de salud para seguir recabando información.

Información para abortar. Miércoles 9 de mayo.
– No dormí pensando en lo que me dirán en el centro de salud. Quede temprano con Laura, y me marcho sin dar tiempo a que mi madre me pregunte a donde voy tan pronto. Cuando tenga la solución a este problema que no se me quita de la cabeza se lo explicare todo.

– Es una prestación de la seguridad social me confirma la trabajadora social.
Para iniciar el proceso de interrupción voluntaria de embarazo debo acudir a una de las clínicas concertadas de Asturias, me da direcciones y teléfonos y decido llamar a una de ella, ya que Laura la conocía.

Por teléfono me informan que lo primero que tengo que hacer es recoger un sobre con unos folletos informativos y que para ello no necesito cita previa, en el horario que la clínica permanece abierta puedo ir cuando yo quiera, eso sí me advierten que si soy menor de edad debo ir con mis padres. Eso me lo temía por lo que había leído en internet, así que ya no puedo demorar más contarlo en casa.

Corremos para el instituto para no llegar tarde y evitar que llamen a casa preguntado por mí; hoy con contar lo de mi embarazo ya tengo bastante, no quiero que mis padres me estén esperando mosqueados.

Llega el momento de hablar con mis padres. Al salir de clase tengo que darme prisa para poder contárselo a los dos juntos, pero mis pies no quieren avanzar, tengo la sensación de que doy un paso hacia adelante y dos hacia atrás.
Cuando llego a casa mi padre ya está comiendo, tiene que marchar pronto, así que no me puedo demorar mucho. Dejo la mochila encima del sofá y al entrar en la cocina mi madre, que a veces parece un poco bruja, me mira y me dice:
-Tienes mala cara
– ¿Te encuentras bien?

No puedo más y me pongo a llorar soltando todos los nervios y miedos que llevaba aguantando estos dos días.
Preocupada me abraza y los dos casi gritando, ante mi falta de palabras, solo lágrimas, me preguntan:
– ¿Qué te pasa?,
– ¿por favor dinos que está pasando?

Estoy embarazada, por fin consigo hablar les suelto de un tirón toda la historia con pelos y señales, tan solo omití el nombre de Pablo; no quiero que sepan quién es; no tiene ningún sentido; además conocen a sus padres y no me apetece que haya rollos con ellos.
Después de la sorpresa inicial, me miran como si fuera la primera vez que me veían y con cara de estar agobiados llegó el batallón de preguntas:
– ¿cómo no tomaste medidas?
– ¿en qué estabas pensando?
– ¿te acuestas con chicos al tuntún?
Poco a poco el tono fue cambiando y las preguntas también, ¿por qué no nos lo dijiste antes?, ¿Cómo te encuentras?, ¿Cuándo quieres que vayamos a la clínica para recoger esa documentación que nos dices? ¿Estás asustada?

-Uff¡¡ qué alivio, ya lo solté todo; al ver que apoyan mi decisión me doy cuenta de la suerte que tengo de tenerlos a mi lado.

Acudimos a la clínica esa misma tarde mi madre y yo vamos a recoger el sobre informativo; tal como me dijeron en el centro de salud acudimos con los DNI y las tarjetas sanitarias. Desde el primer momento me sentí a gusto con la naturalidad y amabilidad conque nos trataron.

Nos explicaron que a partir de la recogida de la información debían pasar como mínimo 3 días para poder realizar el aborto, que debo hacer un análisis de sangre (me entregan el volante) y una ecografía para confirmar el embarazo y ver de cuantas semanas estoy embarazada (eso me lo haran el día de la cita), me explican los dos métodos para abortar; mediante pastillas (farmacológico) o con una aspiración en quirófano. Como soy asmática y tengo alergia a varios medicamentos pensamos que es mejor que opte por este último; me tranquilizan diciéndome que puedo hacerlo con anestesia local o con sedación, de esa manera me duermen un poco y no sentiré dolor; debo ir en ayunas. La cita es para el lunes siguiente, 14 de mayo a las 11:00.

Hoy tengo la cita para abortar. Lunes 14 de mayo.
– Mi padre pidió permiso en su trabajo para acompañarme, estamos todos un poco nerviosos, sobre todo yo, aunque me dijeron que no me va a doler el miedo no me lo quita nadie.

Llegamos a la hora prevista, nos pasan a un despacho para hacerme la historia clínica y seguidamente a la sala de ecografía, después nos mandan esperar en la sala.

Dicen mi nombre y ahora ya tengo que ir sola, mis padres deben esperar fuera, me dan un beso y una sonrisa, se lo devuelvo, estoy muy nerviosa.
Entro en una habitación y la enfermera que me acompaña me dice que me vista con una bata para entrar al quirófano. Ya estoy preparada y no me deja sola en ningún momento.

Me despierto en la cama, no sé cuánto tiempo pasó, avisan a mis padres y me dice mi madre que no más de 20 minutos. Me siento un poco mareada pero aliviada; ya paso todo. Poco a poco mi cabeza se va despejando, voy recuperándome y cuando me puedo incorporar me visto; entre tanto me traen un zumo que agradezco mucho, tenía sed.

Ya nos podemos ir a casa, me entregan el informe de alta provisional con una serie de cuidados, recomendaciones y medidas de higiene que tendré que seguir hasta la próxima cita que es dentro de 15 días, que me harán otra ecografía y entonces ya recibiré el alta definitiva.

Tanto mis padres como yo nos vamos agradeciendo a todo el personal el trato recibido y que en unos momentos tan difíciles nos transmitan tranquilidad y cuidados no solo físicos.

Revisión y alta definitiva. 30 de mayo.
– Hoy hice la revisión que tenía pendiente; todo salió bien ya tengo el alta definitiva, y lo primero será ir a una consulta de planificación familiar y obtener toda la información necesaria para no tener que pasar nunca más por esta experiencia.

Este relato está basado en la experiencia de muchas mujeres, sean menores o no, que acuden a nuestra clínica cada día.
Desde el año 2010 (Ley 2/2010) en España se puede interrumpir el embarazo voluntariamente a petición de la mujer hasta la semana 14.

No dudes en acercarte a nuestro centro si necesitas información sobre la interrupción voluntaria del embarazo. 30 años avalan la calidad de nuestros servicios.

Infórmate en Belladona