La sexóloga y pedagoga Sara Rodríguez explica las señales para detectar situaciones de control, maltrato psicológico y manipulación en parejas jóvenes

Beatriz BREA
La sexóloga y pedagoga Sara Rodríguez, en el Centro de Estudios Universitarios de Avilés. IRMA COLLÍNLas cifras de muertes por violencia contra las mujeres llenan constantemente las portadas de los medios de comunicación. Pero hay que tener en cuenta que el maltrato no sólo se da de forma física sino también psicológica y que puede existir ya en los amores de juventud: “La violencia física es más de parejas adultas, es como una segunda violencia; mientras que el maltrato psicológico -manipulación, control, celos- comienza ya en la adolescencia”, explica la sexóloga y pedagoga Sara Rodríguez Pérez, encargada ayer de la charla “Parejas jóvenes: ¿Amor y violencia?” que se engloba en los cursos de sexología que ofrece esta semana en Avilés la Universidad de Oviedo.

Según comenta la sexóloga, la tendencia de los jóvenes a “mitificar el amor” y a dejarse llevar por el enamoramiento es una de las principales causas de esta violencia psicológica.

Pero, ¿cómo saber que se está sufriendo este tipo de maltrato? Los primeros signos puede descubrirlos la propia persona: “Debes reflexionar sobre cómo te sientes con la relación; si crees que tu pareja no te valora, tiene actitudes de control, hay insultos? entonces debes darte cuenta de que algo va mal”, asegura Rodríguez, aunque también reconoce que la víctima no suele ser la primera en darse cuenta de estas situaciones, sino su familia y amigos.

Este tipo de relaciones también provocan estrés y ansiedad por el control que ejerce un miembro de la pareja sobre el otro. “Si sientes que tienes que justificar ante tu compañero todo lo que haces, puedes estar ante un caso de violencia psicológica”, argumenta la sexóloga, quien por otro lado asegura que también se dan situaciones donde la violencia la ejerce la chica: “La necesidad que inculca la sociedad de tener pareja lleva a chicos y chicas a intentar conservar sus relaciones a a toda costa, y eso provoca la aparición de estas conductas controladoras”.

Para evitar que exista este tipo de violencia psicológica lo primordial es que los jóvenes “aprendan a valorarse por sí mismos, tengan una autoestima positiva, confianza personal, y sean independientes y autónomos”, explica Sara Rodríguez.

Las estadísticas dicen que hoy día hay más casos de violencia, pero “lo que ahora toca estudiar es si realmente hay más violencia o si lo que ocurre es que hacemos más encuestas sobre este tema”, concluye la sexóloga.

1 comentario
  1. Un artículo en el que se dan algunas claves para ver venir la violencia contra las mujeres. Sí tienes que justificar todo lo que haces ” es un punto de comienzo para confundir amor con posesión. Compartir con ceder espacios, cuidar con no respetar los deseos

    Blanca Canedo-Argüelles
    Clínica Belladona